Este jueves, mientras su padre sufría en un palco del Emirates Stadium del Arsenal, ellos sufrían en la distancia, en Argentina. Y cuando su padre festejaba con el puño cerrado el gol de Griezmann que puede valer una final de Europa League, ellos enloquecían casi, casi, al mismo ritmo, a unos cuantos de miles de kilómetros de distancia. Ese vídeo, de esa celebración, es una de las grandes tendencias virales entre la parroquia colchonera.