Historias de Boxeo (II): Jero García y la huella de Max Schmeling, el boxeador al que Hitler no pudo comprar

Max Schmeling podría ser un alemán cualquiera de no haber mostrado un interés mayúsculo por el boxeo en los difíciles años treinta que azotaron nuestro planeta. Un alemán cualquiera alejado de la mirada de Adolf Hitler, o un alemán cualquiera cuya pasión no supusiese un arma de doble filo: racial y político.

Blanco inmaculado en un momento en el que la supremacía racial estaba a la orden del día, Schmeling, protagonista de la nueva entrega de 'Historias del Boxeo' de Jero García, decidió que su relación con la política no merecía la pena, algo que no cayó demasiado bien en el Reich.

Además de una más que interesante relación con el aparato del partido nazi, imperante en su tierra natal, el periplo por el boxeo que realizaría el alemán dejaría varias curiosidades. Por ejemplo, cuál fue su relación exacta con la aparición del pilates o por qué podemos vincular al teutón con un refresco conocido a nivel mundial.